"La isla interior" es la película española que más me ha gustado este año. Es un trabajo maduro de dirección, un soberbio alarde de lo que deben ser unas excelentes interpretaciones, una historia que va de dentro hacia fuera... como las películas que tanto me gustan. Esas películas que no hacen ruido, que casi nadie ve... esas películas que ocultan toda una lección de vida.
Félix Sabroso y Dunia Ayaso eran unos directores de cine que hacían películas "intranscendentes"; "Perdona bonita pero Lucas me quería a mi", "Descongélate". Félix Sabroso y Dunia Ayaso buscaban su camino en "los años desnudos". Félix Sabroso y Dunia Ayaso con "La isla interior" firman la que de lejos es una de las mejores películas españolas de los últimos diez años.
Un film conciso y certero. Muy breve de tiempo pero intenso. Con momentos emocionales que ni Almodóvar ha sido capaz de captar y rodar en toda su carrera. Porque en esta película nada es exageración. Todo es medido y concentrado, pero cuando la carga dramática explota ya no hay marcha atrás. Te agarra, te atrapa, te lleva a la historia de una familia típica en apariencia que esconde secretos pasados... presentes tortuosos... futuros nada claros.
El final es demoledor. Por lo frío de su mensaje y lo ajustado de su puesta en escena. Ese plano ajustado pero emotivo y a la vez frío, encierra la esencia de lo que el cine debe ser, de lo que a veces debe comunicar; las apariencias engañan. Nada es lo que parece.
Desde ya fan absoluto de esta obra maestra que desgraciadamente ha pasado sin pena ni gloria por nuestras pantallas. Película que podéis ver gratuitamente si este mes compráis la revista FOTOGRAMAS, ya que ofrece un visionado on-line para todos los lectores que se hagan con el número de este mes.
Que alegría ver que los directores crecen, que se hacen mayores... que encuentran su camino cuando parecía que todo estaba perdido. Que se atreven a contar... lo que nadie ha contado.