FUEGO EN SAGITARIO

domingo, 30 de junio de 2013

Hasta siempre

Os escribo para despedirme.

Este espacio ya ha cumplido su función. Nació, se desarrolló con alegría y sinceridad, alcanzó su madurez... y como todo, debe morir.

Hasta hace pocos segundos estaba escribiendo un post largo y tedioso donde os explicaba las razones por las cuales no volveré a escribir en este espacio. Eran razones lícitas y coherentes con mi persona y mi situación actual... Pero sinceramente era aburrido.

Lo resumiré todo en dos o tres frases que se puedan entender.

No escribiré más en este espacio porque siento que ya no me pertenece. Así de claro y así de sencillo. Ya no me siento dueño de un espacio que se ha hecho grande e inmenso...y se ha hecho tan grande e inmenso que su única finalidad (la finalidad por la que fue creado) se ha perdido con el tiempo. La esencia ya no está. No he sabido mantenerla.

No voy a borrar el blog porque tampoco creo que miles y miles de horas invertidas sean pasto de un sólo click. De hecho voy a dejar el blog tal y como está porque sé que a día de hoy aún sigue ayudando a gente, y muchas más son las que pasan por aquí para leer aquello que hace cientos de noches o de días escribí desde lo más profundo de mi corazón.

Tampoco os miento, puede que vuelva dentro de algún tiempo, con un blog nuevo donde pueda contar miles y miles de cosas, eso sí, ya desde el anonimato más seguro, pues este espacio se ha hecho tan grande, ya me conoce tanta gente que a veces pienso que quizás me he expuesto demasiado y sin querer también, por algunas de mis palabras o comentarios, pude hacer daño a personas que durante un tiempo fueron muy importantes para mi. No era mi intención. Pero escribía con letras de fuego. Supongo que eso es lo que ha hecho a este espacio un lugar tan especial.

Han sido muchos años, han sido muchas noches y días. Leo cada post desde el primero que publiqué y cada post me recuerda a un momento determinado de mis últimos años; Cuando volvía de marcha y antes de dormir me fumaba un cigarrillo, cuando amaba con locura, cuando odiaba con dolor... cuando recordaba mi estancia en Barcelona, cuando recordaba viejos amores... cuando uno a uno contaba y fragmentaba los momentos más importantes de mi vida.

No puedo negar que cada post lleva mi sello. Y orgulloso que me siento de ello.

En fin, lo he pasado genial. Espero que, en algún que otro momento de vuestro viaje conmigo mis palabras os hayan hecho algún bien. Esa era mi intención.

Hasta siempre!

Fuego en Sagitario

Lunes  1 de Julio de 2013








domingo, 21 de octubre de 2012

El otro día

El otro día volví al BAR DE DIEGO. Sí, el bar que está frente a la antigua Escuela de Arte Dramático, donde pasé algunos años bebiendo coca-cola, té y de vez en cuando alguna que otra cerveza entre clase y clase. Nuestro punto de reunión. "El salón de nuestra casa"....

Es extraño volver de nuevo a un sitio que antes tenía mucha vida y ahora desgraciadamente no tiene ninguna. Hasta Diego me lo dijo, el dueño del bar, "desde que quitaron la escuela, desde que ya no estáis vosotros esto no tiene vida alguna".

Era triste ver las mismas mesas de siempre, que antes estaban llenas de alumnos que estudiaban, hablaban o reían, y verlas ahora solitarias, sin nadie alrededor de ellas, en el mismo espacio que tantas veces nos observó hacer proyectos de futuro... y soluciones del presente.

Tengo que reconocer que sentí un pinchazo en el estómago al comprobar que el tiempo pasa. Que donde un día pensamos que estaba todo, ahora no hay nada. Que lo que un día pensamos era el centro del universo, pues en cierto aspecto un lugar puede ser en algún momento tu centro vital, ahora no es nada, sino un recuerdo poblado por fantasmas de un tiempo que quizás no fue mejor... pero que sí recuerdas con mucho cariño.

No pude evitar acordarme de las tardes de Invierno con el té caliente y el "pitufo" de jamón serrano mientras apurábamos un último cigarrillo antes de entrar a las dos últimas clases de la tarde. Las risas de muchos de nosotros, los textos teatrales que teníamos que leer, los trabajos a terminar de manera rápida y algo desordenada pues tenían que ser entregados después de "la merienda".

Me acordé del primer año, de las salidas (todos los planes nocturnos se ideaban en esas mesas), de las primeras charlas y conversaciones entre los compañeros. De una vez, a dos días de la nochebuena, cuando nos tomamos la limpiadora de la escuela, la conserje y yo, unos chupitos de anís mientras cantábamos a Diego un villancico. Eran días felices. Eran noches divertidas. Eran jornadas de aprendizaje y descubrimiento.

Tampoco pude evitar acordarme de Carlos que ya no está con nosotros. De sus divertidas charlas, de sus almuerzos compuestos por ensaladilla rusa y coca-cola Light, de dus idas y venidas hacia fuera del bar para hablar por su teléfono que nunca dejaba de sonar... de cuando entre clase y clase, allí en el bar, te daba una charla sobre cualquier tema y sin preguntar te solía dar unos enormes consejos que a día de hoy aún sigo. Diego y yo hablamos de Carlos, de lo increíble (en el mal sentido, por supuesto) que es ver desaparecer a una persona tan joven, tan llena de vida y tan artísta. La verdad es que si alguien nos hubiese dicho que Carlos iba a faltar, no lo hubiésemos creído.....

Y entre pensamiento y charla... entre mirada a las mesas vacías y recuerdos de un ayer que aún parece cercano me marché del bar de Diego. Triste y cabizbajo. Pensando en muchas cosas y en nada en partícular. Triste. ¿Por qué todo lo hermoso se termina? ¿No sería posible vivir una vida entera para cada cosa hermosa que nos ocurre? Una vida entera para ser estudiantes, una vida entera para dedicarle el tiempo a tu amor, una vida entera para hace el amor por primera vez... una vida entera donde todo se eternizara. Sería bonito.

Lo que yo no sabía cuando me marché del bar de Diego es que tres días más tarde mi mente volvería a recordar cosas en ese bar y en concreto a una persona que durante muchas horas habló conmigo en esas cuatro paredes de cine, teatro y libros.

El caso es que el miércoles pasado estaba reunido con mi equipo cerca del bar de Diego cerrando algunos temas del rodaje de mi siguiente cortometraje cuando me encontré a David. David fue uno de mis mejores amigos en la escuela; pasamos por muchas cosas juntos y aunque el tiempo nos separó yo le guardo un enorme cariño.

Pues bien, David me preguntó si me había enterado de lo que le pasó a X el año pasado... Yo le dije que no... y David me dijo "se suicidó". Y en ese preciso momento me quedé helado.

X es el nombre de un chico que era alumno de la escuela y con el que yo me llevaba muy bien. Estaba un curso por encima de mí y siempre solíamos tomar un café antes de entrar a la escuela, mientras charlábamos sobre cine, nuestra auténtica pasión. Fueron muchas horas de charlas y confesiones... de cambiar opiniones sobre compañeros, profesores, métodos, libros, situaciones personales, etc, etc.... En realidad X nunca salió conmigo de marcha, ni tan siquiera nos vimos fuera del horario de clase, fuera del horario del café en DIEGO, pero durante los dos primeros años se estableció entre nosotros un vínculo que iba unido al primer café de la tarde, antes de entrar a clases...

En fin, que David me dijo que X se había marchado a otro país buscando sus sueños y que tiempo después había decido quitarse la vida. Una persona que no tendría más de 30 años. Una persona que tenía un gran talento para el teatro (yo vi alguna de sus direcciones y puestas en escenas...), una persona que, de algún u otro modo, siempre intuí tendría un fin parecido. Sé que suena fatal decir lo que he dicho pero sinceramente esta persona parecía alguien a punto de estallar, que estaba presionada por muchos sitios y lugares... sufridora de poca comunicación, solitaria.... con una necesidad imperiosa de sentir cariño y atención. Quizás por eso hice tan buenas migas con esta persona, porque un día la vi sentada sola entre mesas llenas de gente... y siempre me gustó ser acogedor con todo el mundo que se podía sentir desplazado. Es más, de hecho puedo certificar que esta persona incluso caía mal a muchas otras personas y estas personas ni siquieran lo conocían... En fin, la típica historia que desgraciadamente se repite en muchos centros escolares y/o universitarios.

La última vez que vi a esta persona bajaba las escaleras de la escuela y estaba muy enfadado, (y con razón). Después de un tiempo fuera había decidido retomar sus estudios y volvió a clase tres semanas después de haberse iniciado el curso. La primera toma de contacto con los profesores de una de las asignaturas fue fatal, le dijeron textualmente.... "que iba a suspender".... En fin, decir semejante chorrada a un alumno que sólo había faltado tres semanas a clase de un total de nueve meses que había por delante.... Simplemente por el mero hecho de joder, porque otra cosa no, pero en esa escuela había profesores con muchas ganas de joder a los alumnos, desmoralizarlos, hacerlos sentir mal... con ganas de verlos fracasar, porque muchos de esos profesores eran unos fracasos andantes... Es tener mucha mala leche. Y de ser malas personas.

En fin, que me encontré a esta persona por la escalera y me dijo casi con lágrimas en los ojos; "me quieren joder la vida... no quieren que vuelva a estudiar"... Y yo le animé diciéndole que a mi también me la tenían jurada algunos profesores (cosa que era verdad)... y que no debía de hacer caso y volve a clases. Fue aquella tarde cuando esta persona decidió abandonar España para buscarse un futuro artístico mejor. Si aquella tarde estos profesores hubiesen recibido a este alumno de forma calida y humana, quizás no hubise tomado esa decisión y quízás a día de hoy estaría vivo. Está claro que no estoy haciendo a nadie responsable de una acción, simplemente digo que pequeños gestos pueden ayudar a cualquier persona a no sentirse mal y por ende a pensar que la única solución es dejar este mundo. ¿tanto cuesta?

Me imagino el infierno que tuvo que pasar esta persona en una nueva ciudad, en un extraño y lejano país. No quiero ni pensarlo.

Primero Carlos y ahora esta persona.... tan jóvenes....

Son cosas que ocurren y te hacen pensar.

Que nadie os joda vuestros sueños y vivir cada momento como si fuese el último.

Son las dos únicas cosas que realmente dependerán de nosotros. Por lo tanto, no las desaprovechemos.





miércoles, 16 de mayo de 2012

VITTORIO DE SICA, ESE GRAN VISIONARIO

Yo amo el cine italiano por encima de todas las cosas. No el de ahora, aunque de vez en cuando nos regale películones, sino el de antes, más concretamente el que va desde los años 1940 al 70. Sinceramente son películas maravillosas, y me atrevo a decir que el talento que tenían sus directores no lo tenían, ni siquiera, muchos de los más afamados directores de Hollywood. Principalmente por dos motivos; primero porque los italianos trabajaban con menos dinero y eso se notaba en la imaginación, y segundo porque como Europeo, las historias italianas son más reconocibles para nosotros que las historias norteamericanas.

La cuestión es que si me tuviese que ir a una isla desierta y me obligasen a elegir entre llevarme películas italianas, españolas, norteamericanas o inglesas (que más o menos son las que más me gustan, y casi me las he visto todas), yo eligiría sin lugar a dudas las películas italianas.
Hace tres semanas asistí a una conferencia de Alex De La Iglesia, y entre otras cosas, dijo que el cine italiano tuvo una época maravillosa y que sin lugar a dudas, era el mejor cine mundial que por aquellos tiempos se estaba haciendo. Y yo estoy más que de acuerdo.

El cine italiano tiene creadores inmensos; Fellini (que para un servidor es Dios), Antonioni, Visconti, Germi, Rosellini.... etc, etc. Hoy os quiero hablar de uno de estos directores, y su nombre es Vittorio De Sica.
De Sica era de familia de pasta, (creo recordar que de la alta aristrocrácia italiana), pero el jovencito con futuro prometedor en la empresa de Papá salío rana, y se dedicó a actuar cuando era joven. Mucho tiempo después se percató de que lo suyo era el cine y decidió hacerse director.

De Sica es el director italiano que más Oscars tiene, (junto con Fellini), y recibió 4 estatuillas más que merecidas, y un buen puñado de nominaciones a mejor guión original, lo que no deja de ser curioso, ya que Hollywood en aquellos tiempos era reticente al cine extranjero, pero Fellini y De Sica siempre encontraban su lugar entre las estrellas.

De Sica tiene dos etapas; la neorrealista (aquella en la cual pretendía hablar sobre la realidad de Italia en aquellos tiempos, durante y después de la segunda guerra mundial), y la etapa COMEDIA A LA ITALIANA, donde filmó maravillosas comedias que a día de hoy se encuentran, casi todas ellas, entre las mejores películas de la historia del cine. Al final de su vida mezcló el cine serio con la comedia y nos regaló sus obras más desconocidas "El jardín de los Finzi Continni" y "Los girasoles".

Pero me voy a entretener en su etapa neorrealista.

No hay que ser muy listo para saber que actualmente vivimos tiempos más que jodidos, pues bien De Sica nos habla de estos tiempos y de estas situaciones en sus películas de antes.

En "Ladrón de bicicletas" (quizás una de las diez mejores cintas de la historia), De Sica nos relata la historia de un hombre que no tiene trabajo y está desesperado por encontrarlo, puesto que su familia se muere de hambre y tiene dos hijos, uno de ellos pequeño y enfermo. El protagonista de nuestra historia encuentra un trabajo; "pegador de carteles", pero para realizarlo necesita una bicicleta. Así que no tiene más remedio que encontrar el dinero para comprarse una bicicleta. Cuando ya la tiene se pone a trabajar pero otro hombre se la roba... A partir de este momento el film de desarrolla con una línea drmática muy simple pero efectiva; la desesperación de este hombre recorriendo las calles de Roma con su hijo inentando encontrar la bicicleta que le han robado. La película dura apenas hora y media, pero os puedo asegurar que se te ponen los pelos de punta en más de la mitad del metraje. Es una fina y astuta reflexión sobre la sociedad en la cual vivimos, sobre las necesidades de nosotros como individuos y de la supervivencia en un mundo donde lo material, desgraciadamente, significa vivir.

Antes de "Ladrón de bicicletas", De Sica nos regaló "El limpiabotas", una maravillosa película donde dos niños; uno adolescente y otro de uno 10 años, vagabundean por la calle sin nada que hacer, ya que o bien no tienen familia o bien ésta no los puede mantener. El sueño de estos chicos es tener un caballo blanco y por medio de un "chanchullo" logran conseguirlo, pero desgraciadamente son metidos en un centro de menores, bueno, centro, centro.... parece una cárcel con todas las de la ley. A partir de este momento el film nos cuenta las peripecias de estos chicos por sobrevivir en el centro de menores y por ser algo en la vida. Pero lo tienen jodido, muy jodido. El final es uno de los finales más sobrecogedores que he visto jamás en mi vida. Mitad realista y mitad mágico, ya que de pronto uno de los chicos muere y el caballo blanco sale de la niebla con paso firme... como indicando que el chico muerto ahora es el caballo, y ya puede cumplir su sueño de libertad.

El siguiente film a tener en cuenta es "Umberto D", la historia de un jubilado que vive en una pensión al cual le bajan (o le quitan), no recuerdo ahora mismo, la pensión que percibe por haber sido toda su vida funcionario. La única esperanza que tiene este abuelito es un perro que lo cuida y le la compañía. El abuelito, sin apenas nada que comer y en la calle, se las tiene que arreglar para sobrevivir, y he aquí que el personaje está tratado de una manera humana, sencilla, real y directa... Cuando se tiene que poner a pedir le da verguenza porque hay gente que le conoce por la calle, y el abuelito no quiere pasar verguenza, entonces decide enseñar al perro a tomar su sombrero a modo de "cajita" para que cualquiera le eche una moneda. Juro por Dios que la mejor secuencia del film es cuando el perro se pierde y el abuelito se entera de que va camino de la perrera donde será sacrificado. Son quince o veinte minutos de auténtico cine, donde el corazón se te pone en un puño, puesto que ese perrito adorable es para el abuelo como un hijo, el único ser vivo que sabe entenderle, protegerle y hacerle reír.

El otro film más que actual es "Milagro en Milán" una deliciosa obra de realismo mágico donde unos vagabundos y sus familias crean una comuna en un solar cerca de Milán. Allí cada cual vive como puede, pero lo importante es que se ayudan unos a otros. Las cosas se complican cuando el dueño del solar, un especulador asqueroso, se da cuenta que debajo del suelo hay petróleo. Total, pasa lo que tiene que pasar, que el especulador intenta echar a los mendigos... pero estos son ayudados por una paloma mensajera que tiene el Don de conceder todos los deseos. La película es más que curiosa porque combina muchos géneros; comedia, drama y cine fantástico, pero sinceramente es digna de ver. Puede parecer que al director se le va la olla en un par de momentos, pero si te dejas llevar, disfrutas y sientes, el film regala momentazos de cine auténtico y da esperanzas al pensar que un mundo mejor es posible.

Lo curioso de De Sica es que se autodefinía como comunista y católico. Muchos pueden pensar que una cosa es incompatible con la otra, pero yo creo que no, sobre todo si nos damos cuenta de que el comunismo y el catolicismo de sus films, si fuesen así en la realidad, serían más que perfectos.
A mi me gusta De Sica porque sus películas me apasionan y me emocionan, me enternecen y me entristecen, me hacen pensar que el ser humano es maravilloso cuando quiere... y muy hijo de puta cuando también lo desea. Pero si algo me pirra de De Sica es que su cine es directo y sencillo, humilde en planteamientos y en ejecución, pero inmenso en trascendencia .

Muchas veces he soñado con hacerme Ministro de Cultura y enseñarle a mis compañeros de gobierno o de partido algunas de sus películas, de seguro que más de uno caería en la cuenta de que no hay necesidad de joder al personal.

Dicen que el arte es importante cuando cambia el mundo. Yo creo que nada cambia el mundo, pero por el contrario siempre he pensado que si el arte sirve para cambiarte a ti mismo, ya está todo el trabajo hecho.

Esa es su grandeza.
Es usted un genio Señor De Sica.

Se le echa de menos en estos tiempos.



viernes, 20 de abril de 2012

15 FESTIVAL DE CINE ESPAÑOL DE MÁLAGA

Mañana comienza el 15º Festival de cine Español de Málaga. ¡Madre mía! Media vida asistiendo a este evento, año tras año... ¡cómo pasa el tiempo!

La verdad es que todos los años me propongo realizar en mi blog una crónica de las películas más interesantes que veo en el festival, y recuerdo que durante un año, creo que en el 2009, hablé de algunas de ellas diariamente... Pero tengo que ser sincero; me resulta un auténtico coñazo hacer crónicas, es más, casi siempre me resulta un auténtico coñazo tener que hablar de una película en cuanto la he visto, prefiero que pase un tiempo, si acude a mi memoria pasado ese umbral es porque la película merecía la pena, si esto no ocurre, no tengo la menor duda; la película no ha significado nada para mi.

En fin, en cualquier caso podéis leer sobre las películas del festival en la prensa local y en la nacional, o buscar información sobre las mismas en la página web.

El año pasado estuve compitiendo con mi cortometraje y para mi es un auténtico alivio no tener que hacerlo este año. Competir en la ciudad de uno es un auténtico coñazo, no sé, me pongo más nervioso que si lo hago fuera de mi ciudad, puede parecer una tontería pero no lo es... Entre que en tu ciudad la gente te conoce, entre que compites con "compañeros", entre que estás "más o menos cerca" de las personas que deben tomar la decisión de premiar o no a tu corto.... intrigas palaciegas, comentarios, chismes... ¡¡¡PASO!!! Este año a disfrutar de las películas ajenas. Me relajaré, me dejaré llevar y asistiré a cuantas proyecciones me de tiempo.

¡Cúanto he cambiado desde hace 15 años! Yo mismo y mi actitud hacia el festival. Recuerdo que hace unos seis o siete años, colarse en las fiestas del festival era toda una tradición, y estaba con los amigos, casi siempre era Toni, dos semanas dándole al coco para poder "colarnos" en una de las fiestas y ver que se cocía allí dentro.... Ahora paso. No me interesa lo más mínimo la fiesta. En realidad me he dado cuenta, sobre todo desde que he rodado, que no me gusta el rollo de las fiestas ni nada de eso, a mi lo que me gusta es escribir y rodar. Lo demás no. No es que me aburra el lado "ocioso y elegante del cine",  pero siento que es muy ajeno a mi.

También hace mucho años conseguir una acreditación era toda una odisea... Tenía que llamar a este lado, y al otro... Ahora me invitan todos los años, me dan la acreditación y puedo disfrutar de todas las películas sin el menor de los problemas.

Está claro que cuando uno observa desde la barrera a los toros lo vive de diferente manera, pero cuando uno ya está o bien acostumbrado o bien mínimamente relacionado con "la corrida", la impresión, las ganas y quizás la curiosidad merman de manera considerable. Ya no es lo mismo. Ya no siento esa necesidad de sentirme "integrado" en un mundo que me gusta... A mi manera ya estoy integrado y he descubierto que la mejor integración es aquella que, paradójicamente, se vive desde una cierta lejanía, siendo un mero observador de los hechos o las circunstancias y sólo actúando en ellas cuando es estrictamente necesario.

De igual modo me aburre un poco asistir a las veladas post-proyecciones.... Básicamente consisten en que te vas encontrando con mogollón de gente y comentas la película en cuestión, el ambiente del festival o los últimos cotilleos del cine malagueño. Ya estoy muy mayor para esas cosas. Ahora sólo deseo ver películas, tomarme una copa o cenar fuera... y volver a casa temprano para al día siguiente asistir a una nueva proyección. Esto no significa que una noche o dos me pueda perder por los ambientes "bohemios" de la farandula... pero ya no es la misma sensación que antes.... Antes era más divertido, pues todo contenía un "plus" de peligrosidad o de osadía.... Ahora ya no. Vamos, en pocas palabras... mis sentimientos aventureros se están aburguesando de manera clara.

Cosas de la edad. No se puede evitar.

El otro día un amigo me comentaba; "Tío, no se te ve el pelo por ningún sarao o rodaje"... y yo le dije "es que me estoy volviendo como Kubrick"... y él me dijo "jajajaja... Ten cuidado, se vayan a pensar algunos que te estás comparando con él" y yo "Para nada, joder... simplemente digo que cada día me apetece estar más con mis amigos y mi gente de verdad y separar este mundo del profesional". No porque en el mundo del audiovisual no tenga buenos y grandes amigos, que sí los tengo, pero sinceramente a veces esta situación me satura un poco.... y de pronto caigo en la cuenta de que es un absoluto placer ver a los amigos "ajenos a todo este mundo" y hablar de cosas diferentes; la vida, el amor... o simplemente echarte unas risas y disfrutar de lo que traiga la velada.

Si algún día llegase a tener una carrera fija y de cierto éxito en el mundo del cine no me cabría la menor duda de que Júlia sería la encargada de obligarme a ir a los eventos cinematográficos y a las charlas de café de profesión, simplemente por el mero hecho de que, en cierto modo, son importantes, pero también no descarto la idea de rodar, estrenar... y estar en casa tranquilamente ajeno a todo el ruido y los fuegos artificiales que este mundo te ofrece.

En fin... si tengo gana os iré contando con todo lujo de detalles... Sino, sólo os hablaré de algo curioso que me ocurra y/o sea digno de mención.

Un fuerte abrazo!





jueves, 5 de abril de 2012

VIDEO BOOK JÚLIA ESTORNELL

Hola chicos/as

Estoy orgulloso de presentaros el videobook de una persona a la que quiero mucho... (No hace faltan más detalles, jejejeje).

Bueno, no es porque mire a esta actriz con buenos ojos, que también, pero tengo que deciros que tiene madera y eso se nota en este video book que es un escueto, pero directo, ejemplo de los muchos trabajos que ha hecho Júlia Estornell en el mundo de la interpretación.

Actriz completa, curtida en más de 10 obras teatrales y unos 30 cortometraje, Júlia Estornell es una actriz cómica y dramática, una actriz sencilla pero comprometida, una actriz a la que ama la cámara.

Sin más, os dejo con el video-book.

Espero que os guste.

www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=ehVAzdvdSvw

jueves, 29 de marzo de 2012

Sobre escribir PERSONAJES

En post anteriores, (en realidad de hace mucho tiempo), os hablé de escribir un guión a grosso modo. Hoy quiero hablaros de uno de los pilares del guión, los personajes, y de cómo acometo esta tarea de creación.

En primer lugar, ¿qué es un personaje? Pues un personaje de un guión, película y/u obra de teatro es cualquier COSA que tenga cualidades humanas y posea un objetivo. Como veis digo COSA, no persona, y es que hay guiones de películas en los cuales los personajes no son personas, sino animales, objetos y/o estados de ánimo.

De todos modos para no crear confusiones hablaremos del PERSONAJE como una persona.

¿Por qué los personajes son lo más importante de cualquier relato? Pues porque los personajes llevan la idea centralizadora de nuestra obra. IDEA, no mensaje, ya que hay una gran diferencia entre estos dos matices. Una IDEA es una impresión objetiva y/o subjetiva sobre algo, generalmente un tema, por lo tanto se muestra. Un mensaje es una certificación sobre una idea o un hecho que se DEMUESTRA. El trabajo del director o del guionista no es DEMOSTRAR, sino MOSTRAR, y si tenemos algún mensaje que dar con nuestra obra, sobre todo un mensaje que sea muy claro y evidente, más vale que vayamos a la oficina de correos más cercana a poner un telegrama. Nuestro trabajo no es ser psicólogos, ni políticos... no debemos pretender dar soluciones a los problemas actuales, pasados o futuros, sino simplemente mostrarlos y ver como cualquier personaje convive con ellos.

Bien, ¿qué hace interesante a un personaje? Después de mi experiencia al escribir, y de ver miles de películas, obras de teatro y leer novelas, he llegado a la conclusión de que lo que hace interesante a un personaje es SU OBJETIVO. Todos en la vida real tenemos un objetivo, de hecho, si no tuviesemos un objetivo sería porque estaríamos muertos. Por tanto, EL OBJETIVO es lo más importante que tiene un personaje y en base a este objetivo tomará decisiones que corresponderán a la trama o dramaturgia de nuestro guión. El objetivo puede ser cualquier cosa, pero siempre tiene que ser algo en concreto, ya que en la vida, los objetivos que tomamos y por los que nos movemos son concretos. Por ejemplo, QUIERO GANAR DINERO, por tanto nuestro personaje tendrá que hacer todo lo posible para ganar dinero (desde trabajar en lo que sea, hasta robar, pedir prestado, etc, etc, etc).

Una vez definido el objetivo del personaje tendremos que agregarle un OBJETIVO INCONSCIENTE, que debe estar relacionado con el OBJETIVO. Me explico; generalmente los objetivos que nos marcamos en la vida suelen esconder un deseo oculto, algo extraño y poco definido que sólamente al final sabremos que es. EL OBJETIVO INCONSCIENTE es aquello que nos hace tomar decisiones en los momentos de crisis y presión, donde verdaderamente el ser humano (por ende el personaje), se rebela tal y como es. Así por tanto el objetivo de un personaje podría ser encontrar un buen trabajo.... Pero, ¿qué es en realidad lo que quiere el personaje, qué busca con ello? Generalmente cuando queremos encontrar un buen trabajo es porque queremos diferenciarnos del resto de los demás, o bien alcanzar cierto estatus social o bien aplacar nuestra sed de ambición, por lo tanto el OBJETIVO de buscar un buen trabajo esconde el OBJETIVO INCONSCIENTE de TENER PODER, ESTATUS SOCIAL, DIFERENCIARNOS DE LOS DEMÁS... en pocas palabras; un OBJETIVO es más fuerte y seguro cuanto más definidas son sus líneas inconscientes.

OBJETIVO y OBJETIVO INCONSCIENTE dan al personaje una profundidad psicológica mayor, y por tanto hacen de este personaje un ente real y palpable, que será reconocido por todo el público. Si sólo hay OBJETIVO el personaje será plano, apenas tendrá nada por lo que destacar, y entonces el público sólo verá una cara de la moneda, lo que en pocas palabras, significa que el autor o director está engañando al público, ya que nadie, por muy plano que sea, sólo tiene una cara.

Bien, ¿Hay que juzgar a un personaje? NUNCA. Nunca hay que juzgar a los personajes que escribimos. Aunque sean éticamente discutible siempre nos tendremos que poner en su lugar y entender los motivos que tiene el personaje para hacer lo que hace. Como decía Chaplin "todo el mundo tiene sus motivos para hacer lo que hace" y con esta premisa trabajaremos el personaje. Un personaje que no está escrito y prejuzgado tiene más fuerza que uno que nace juzgado, y por ende, censurado por nuestra moral y/o ética. Recordad que somos artístas, no jueces, por lo tanto ningún personaje será juzgado y en la medida de lo posible, siempre que no sea muy claro, expondremos, de manera sútil, los motivos que tiene este personaje para hacer lo que hace.

¿Qué es la carazterización de un personaje? La carazterización de un personaje son sus rasgos físicos, psicológicos y sociales. Todo ser humano está definido por estos tres rasgos. No hay más. Por lo tanto nuestros personajes serán tratados de la misma manera. Ahora bien, ¿qué pasa si nos quedamos en la superficie? Por ejemplo: imaginad que estamos escribiendo el personaje de un MENDIGO. Bien, físicamente está claro que, en la inmensa mayoría de los casos, los mendigos tienen un físico descuidado, así que nadie se creerá que un MENDIGO pueda ir vestido como un banquero. Esto es cierto. Recordad que en el apartado físico, una imagen vale más que mil palabras, y aquí, aún con riesgos de crear estereotipos, tendremos que ser más o menos habituales. Esto con respecto al físico, pero ¿qué pasa si además del físico caracterizamos al MENDIGO con la psicología social y mental que habitualmente pensamos que debe tener un mendigo? Pues que el personaje será, más o menos real pero no tendrá ninguna profundida. Por lo tanto es interesante caracterizar a los personajes de por capas, y estas capas, a pesar del físico, tienen que ser diferentes, alejadas del tópico. Nuestro personaje de MENDIGO puede vestir mal, pero en vez de ir con el cartón de vino borracho por las calles puede leer a HOMERO y recitar en parques públicos a este poeta. Es más, si nuestro MENDIGO cuando está borracho recita a HOMERO el público rápidamente entenderá que MENDIGO tiene cultura y ha obtenido en tiempos mejores una educación maravillosa y culta. Por lo tanto el público sumará... Y ahora no tendremos al típico MENDIGO, sino a un personaje diferente, curioso y enigmático que se rebelará diferente. y por ende tendrá cosas interesantes que decir.

Otro ejemplo; Imaginad al típico terrorista de las películas antes de subir al avión para poner la bomba. Un guionista malo o deficiente hará lo siguiente; presentará al personaje vestido de manera extraña, con una actitud psicológica nerviosa y cuasi exagerada (mirará hacia ambos lados nerviosamente, se esconderá detrás de un periódico, llevará el maletín pegado a su cuerpo en todo momento..) Ahora bien. Imaginad la siguiente secuencia; en la terminal del aeropuerto hay un bar, sobre la barra del bar hay un hombre vestido con traje que está apoyado mientras lee el periódico y se toma un café. A su lado, un maletín. El hombre deja unas monedas sobre la mesa y comienza a caminar, de pronto CAMARERA lo llama "¡Un momento, Señor, se deja el maletín! El hombre vuelve hasta la barra, agarra el maletín y con un amplia sonrísa le dice a la CAMARERA; "Gracias, me ha salvado usted la vida".

Minutos después el avión estalla en el aire. Entendemos de pronto que ese hombre maravilloso que casi se deja el maletín (lo que incluso puede dar a entender que es despistado...), acaba de matar a 300 personas. Este personaje, con una debida presentación y una debida dramatización de los hechos, son de los personajes que se quedan grabadas en las retinas del público.

La gente no es ni buena ni mala, sino compleja, y es por eso que nuestros personajes también deben de serlo. Así serán mas reales.

Otra cosa importante es definir el punto débil de nuestro personaje. Por ejemplo; si el público ve durante dos horas un personaje que continuamente está enfadado la gente pensará, "¡¡¡Nadie puede vivir así¡¡¡" Ahora bien, si durante dos horas presentamos a un personaje cuya vida es estar enfadado y en un momento dado algo o alguien lo hace reír (puede ser una situación, otro personaje o el mismo), el personaje será real. Esa risa entre tanta bordería y enfado se revelará como una fisura en su forma de ser y por tanto hará pensar al público.

De igual modo un personaje que durante dos horas se muestre fuerte, valiente, lleno de principios, deberá tener un momento de cobardía, de debilidad, de duda... Aprovecharemos este momento para revelar secretos y/o actitudes que esté personaje encierra tras su aparente fortaleza, valentía y ética. Y quizás nos demos cuenta de que este personaje en realidad está actuando o bien por necesidad o bien por condicionamientos propios y/o externos. De nuevo en esta ocasión tendremos un personaje de verdad. No una marioneta.

Y ya por último, para no extenderme demasiado; Sobre el diálogo, la voz del personaje, su vocabulario. Un personaje siempre debería hablar según sea su forma de ser o según sea su ocupación. Muchos, a la hora de enfrentar el diálogo de un guión, piensan que esto es estereotipar a un personaje, pero precisamente es en el lenguaje donde el guionista tiene que mostrar que su personaje ES. En este caso DIME COMO HABLAS Y TE DIRÉ QUIEN ERES. Por ejemplo; imaginad un personaje que sea director de cine o un friki de las películas... En una escena de amor podemos meter que le dice a su amante después de un largo beso... "Vaya... si pudiese hacer un fundido en negro y amanecer contigo en tal o cual sitio...". Aunque esto en la vida NO ES REAL (Qué también), es efectivo de cara al público y siempre suele aceptarlo de los personajes.

De igual modo un banquero podría explicarle a su hijo con argumento económico una jugada de un partido de fútbol que ven en la televisión, y una prostituta podría dejar escapar a su novio, antes de hacer el amor (Hoy no te la chupo, no tengo ganas). Está claro que esta frase la puede decir cualquier persona a otra en la vida real, pero en la vida cinematográfica quedaría raro que una mujer de clase alta le dijera a su marido (Hoy no te la chupo, no tengo ganas)... ya que se presupone (siempre en idioma fílmico), que una mujer de clase alta no habla así, que en la vida real si puede hablar así, pero no estamos hablando de la vida real, sino del cine, y en el cine, SÓLO EL DIÁLOGO PUEDE SER MATIZADO Y ESTILIZADO según sea el personaje. Sólamente esto, lo demás debe ser variado y profundizado.

No confundir EL DIÁLOGO con el SUBTEXTO... El subtexto no es cosa de personaje, es cosa de guión, y sólamente una vez en el rodaje, el actor podrá acoplar el subtexto (lo que de verdad se quiere decir cuando se dice algo...) a su actuación. De igual modo, aunque el SUBTEXTO no sea entendido por el actor daría igual, ya que el SUBTEXTO es un recurso estilístico que hacemos en el guión con el propósito de expandir el diálogo del personaje hacia dobles lecturas. Pero vuelvo a repetir, no es cosa del personaje, es cosa del guionista.

Espero que este post de hoy os pueda ayudar a escribir personajes.

miércoles, 28 de marzo de 2012

"La dolce vita"... mi película favorita



Algunos historiadores cinematográficos afirman que el cine moderno comienza con "Ciudadano Kane", de Orson Welles, en el año 1940.


Yo estoy en contra de esta afirmación y daré los motivos. No creo que este film sea el inicio del cine moderno, ya que su modernidad no es tal, años antes, en películas de Lang ("Spione", "Las tres luces") y Murnau ("El último", "Amanecer") se observa el mismo estilo, la misma forma narrativa y estética que predomina en la ópera prima de Welles. Por lo tanto, más que el inicio del cine moderno, "Ciudano Kane" sería una revisitación de los códigos que han hecho del cine lo que es; el séptimo arte.


Para mi el cine moderno tiene su nacimiento en los años 1959 y 1960, con cuatro filmes de vital importancia que renuevan el arte cinematográfico y lo amplia por terrenos pocos explorados, terrenos que abriran de par en par un nuevo modo de entender este arte, y por supuesto, trayendo con estos modos nuevos filmes que se pueden incluir dentro de la vanguardia cinematográfica. No es, por tanto, la mayoría de edad del cine, sino su post-modernismo, o lo que viene a ser lo mismo; otra forma totalmente nueva de entender este arte.


Estas películas son "Los 400 golpes" de Truffaut, "El apartamento" de Billy Wilder, "La aventura" de Antonioni y "La dolce vita", de Federico Fellini.


"Los 400 golpes" representa una ruptura de tono con todo lo que se ha hecho anteriormente. Heredera directa del neo realismo italiana, el film de Truffaut explora los terrenos temáticos de la autobiografía fílmica y utiliza para ello una nueva forma de rodar, lo que se conoció como "Nouvelle Vague". La política de los autores. El director como autor total. "El apartamento", inicia la edad madura del cine norteamericano; los personajes ya no son buenos ni malos, sino que tienden hacia la bipolaridad y hacia la no auto-compasión. Ya no se juzga. Se ve y se actúa en detrimiento de unas situaciones dadas, enfatizadas por el deseo de sobrevivir en un mundo que se ha hecho inhabitable. "La aventura" presenta sin lugar a dudas el cambio más drástico en cuanto en fondo y forma... "La aventura" es un relato sin historia, un espacio fílmico detenido en el tiempo, un tiempo que se expande hacia la nada... y por lo tanto, "la aventura" es un film sobre la observación de otras realidades, los tiempos muertos... la historia es lo de menos, ahora lo que importa son los huecos de la historia... ¿Qué ocurre cuando no ocurre nada?.


"La dolce vita", he aqui la última de las cuatro películas que yo considero inicio del cine moderno. ¿Qué hace a "La dolce vita" ostentar este honor? Pues las mismas constantes que tienen las otras tres anteriores películas, sólo que aqui están juntas, van unidas en una sucesión de secuencias y escenas que llenan la pantalla durante tres horas.


"En la dolce vita" No hay relato. Hay trozos de relato. No hay historia. Hay trozos de historias. No hay tiempos. Hay tiempos entre los tiempos. Momentos muertos de increíble belleza, de increible violencia, de increíble melancolía, de increíble desazón. No hay personajes buenos ni malos; hay personajes que el espectador no puede juzgar porque no hay nada que juzgar... el director sólo muestra, NO DEMUESTRA, y es por eso que en el film ningún personaje goza de nuestra simpatía, pero del mismo modo ninguno de ellos nos resulta antipático. Como en un enorme lienzo barroco; los personajes se presentan ante nosotros cómo máscaras de un teatro Balinés; los personajes son uno, ninguno y todos. Así por tanto Marcello Rubini, el protagonista interpretado por Mastroianni, se presenta ante nosotros como una persona al borde el abismo, y por eso mismo, puede analizar, pensar, discutir y vivir dos vidas sin que una de ellas interfiera en la otra; La vida de un periodista que quiere ser como aquellos que entrevista... y la vida de un personaje de entrevista que vive como un personaje normal, un alma más entre la multitud, alguien que simplemente se puede transformar según el ambiente, el tiempo y el lugar. Meta vida; la anulación del YO para hablar del super YO como UNIVERSO TOTAL, cambiante y transfigurado según aquellos con los cuales colisionamos y nos relacionamos.


"La dolce vita" es mi película favorita. Aún hoy, casi 17 años después de haberla visto me pregunto porqué esta y no otra, es la película que sin lugar a dudas me llevaría a una isla desierta... y porqué esta, y no otra, me puede llegar a definir, no ya como persona, sino como artísta que tiene un modelo a seguir, quizás a imitar.... cuasi imposible de igualar.


El film se abre con la imagen de un Helicóptero que lleva una estatua de Jesús al Vaticano. Dentro del Helicóptero un periodista y su fotógrafo, trabajando para informar del evento, ven que en una terraza de un inmenso edificio tres mujeres toman el sol ligeras de ropa. El helicóptero se acerca y las mujeres, con el ruido de las hélices ensordecedoras, se ponen a hablar con los pasajeros del aparato... En menos de 2 minutos de film, Fellini, director visionario, artísta total, deja clara sus intenciones; el film trata sobre lo profano, lo real, lo humano... la miseria... Ya no existe Dios... (delante de Dios no se seduce a señoras ligeras en Ropa), y si existe Dios simplemente es una figura de Mármol, algo muerto y carcomido que sólo sirve para aparentar.


Termina la secuencia con el Helicóptero que se acerca a la ciudad del Vaticano para dejar la figura en la plaza de San Pedro... A partir de aquí, corte rápido a una extraña máscara; estamos en un Night Club lleno de personas ociosas que fuman, miran divertidas a otras que bailan y muchas de ellas parecen muertos vivientes... apenas se mueven... no comunican.... En pleno siglo XX y con las necesidades satisfechas el hombre deja atrás sus problemas reales de supervivencia... Ahora sólo tiene tiempo para el ocio... para aquellos pensamientos que enmarañan la mente entre el tedio, el aburrimiento y la necesidad de jugar a las apariencias.


A partir de aqui, el film se divide en diversos relatos, todos ellos llevados a cabo entre una noche de comienza y su amanecer. Hay tiempo para satirizar el mundo del cine y sus habitantes, para hablar de Roma, aquella ciudad (cualquiera que sea, la que amemos), que nos acoge y nos regala, sólo para nuestros ojos, momentos brillantes de poesía auténtica y extraña verdad (La fontana de Trevi).


Hay espacio para hablar del amor, aquel que nos da curiosidad y aquel que nos agobia, el amor marital versus el amor prohibido. He aquí por tanto que la mujer ya no es mujer (siempre desde el punto de vista del hombre, claro), sino hermana, madre, amiga, puta, señora, actriz, confidente, novia... La mujer representa aquello que el hombre no puede llenar, por tanto la mujer, es el contenido.... el hombre es la excusa para apropiarse de una verdad que sólo ella conoce. La verdad que lo hará libre. Completo al fin. Ya sea de manera sexual, o de manera divina... La mujer controla lo que siente el hombre. Ella es el TODO. El alfa y el omega. El principio y el fin.


Hay tiempo para la familia. El padre ausente visita a su hijo después de muchos años de incomunicación. Padre e hijo son dos desconocidos que no tienen nada que decirse, y por tanto se comportan como dos actores, cada cual interpretando el papel que le corresponde. Al final, cuando se anuncia la luz del alba, el padre se revela auténtico, cae la careta... No es más que un viejo asustado e impotente que se arrepiente de no haber estado con su hijo cuando este más lo necesitaba... y por tanto, el hijo, no tiene más remedio que ver partir al fantasma de lo que él pensaba era su padre... Caído el mito, nacido la comprensión.


Hay espacio para la amistad. La amistad verdadera y la falsa. Aquella que nos mata y aquella que nos da vida. Y aquella que nos da vida para después quitárnosla. Marcello admira a Steiner, él quiere ser como él. Steiner, su amigo representa todos los valores por los que, en principio, merece luchar; La familia, el trabajo, el arte, los principios... la calma de un hogar que sobresale por encima de una vida llena de mentiras. El personaje de Steiner se presenta (no casualmente) en una iglesia mientras toca en un órgano la "Tocata y fuga" de Bach. Marcello observa a Steiner y por un momento siente creer que está asistiendo a la revelación de Dios... si Dios existe debe de ser Steiner, pues su música sabe a cielo, su paz calma la ira, su rostro denota éxtasis.... Es Steiner, quizás, el padre que Marcello nunca tuvo.


Al final del relato, Steiner dejará ver su mentira... Su tremenda miseria escondida. Miseria que ha tapado de la manera más fácil; haciendo ver que era feliz. Que él controlaba el mundo, no el mundo a él... Y cuando Marcello cae en la cuenta de que todo ha sido una mentira... Otro mito muere, ya no tiene la menor duda; hay que actúar... ya no buscar la verdad, sino acoplar la realidad y hacerla mil pedazos... siendo uno y otros... perderse y encontrarse.... cada día.... aún cayendo derrotado en playas desiertas tras noches absurdas donde los espejos deforman la imagen de uno mismo... El recuerdo. El sentir.


Otros relatos nos hablan de la religión... de la necesidad que el hombre tiene para creer. Y si no hay nada algo habrá... por lo tanto. No es Dios quién crea al hombre, sino el hombre quién crea a Dios.


Un relato nos hablará de otros mundos; los mundos de aquellos que parecen tenerlo todo, que juegan con el dinero y con la ausencia de tiempo, o lo que es lo mismo; con todo el tiempo del mundo. Así que Marcello paseará por estas vidas primero para informar y luego para poco a poco difuminando los perfiles de aquellos que representan lo que él jamás podrá ser; pues Marcello en realidad es un provinciano que juega a ser alguien.... Por tanto necesita de la aceptación de aquellos que, aparentemente, lo son todo.


A mitad del film hay un intermedio a modo de pequeña historia. Marcello escribe en un bar, junto a la playa, y una joven adolescente, camarera del lugar, le sonríe abiertamente. Esa jóven es la inocencia personificada, aquello que no está corrompido porque aún no tiene nada que esconder y que aparentar, y por tanto se muestra tal y como es. Marcello entiende entonces que el problema del hombre no es el tiempo, ni siquiera la edad, sino el conocimiento y el dolor. En una palabra; la verdad.


Tras tres horas de filme Marcello acaba en una orgía donde poco a poco su rostro se va desfigurando y deja entrever aquello que has escondido; Marcello es otro más.... no es diferente. Juega, se esconde, se humilla y humilla.... está a punto de morir para renacer de nuevo... Pero Marcello ya no será Marcello, sino otro Marcello nuevo. Y ese Marcello se unirá al anterior, y así hasta que de una vez por todas... no tenga que esconderse de nada ni de nadie, pues nada ni nadie podrán decir entonces que Marcello miente. Siendo uno y ninguno. Esa es su salvación.


Al final del film, ya amaneciendo, Marcello está en la playa y se separa del grupo porque ve que al fondo, al otro lado de la playa, a unos metros, la bella adolescente lo saluda con la mano. Marcello mira a la bella joven, está le hace una señal que parece decir "Ven".


Marcello abre las manos y hace una mueca de resignación. Sonríe entendiendo que ya está contaminado. Y que por lo tanto no quiere mentir a la adolescente.... Ella, como él, tendrá que aprender a vivir... Tendrá que aprender a sobrevivir. Uno y otro mundo ya no coexisten. No pueden convivir en paz, pues son dos planetas completamente diferentes.


La película termina con Marcello dando la espalda a la joven y caminando hasta el agua, mientras la adolescente, sonriendo ampliamente, se despide de Marcello en un gesto que sin lugar a dudas ninguno de nosotros podremos olvidar.


Por esto... y por muchas cosas más, es "la dolce vita" mi película favorita.