domingo, 6 de noviembre de 2011

Caer mal

Es una rara virtud esto de caerle mal a algunas personas.

¿Por qué caer mal?

Generalmente por dos motivos;

a) siempre digo lo que pienso.

b) siempre (o casi siempre), sobre todo si me lo preguntan, digo la verdad.

Reza el lema "la verdad nos hará libre". Hace libre a la gente inteligente, a la gente que no teme, a la gente que no tiene nada que perder quizás porque ya da por hecho que en este mundo nadie gana. Temen a la verdad aquellos que se creen y crean sus mundos, aquellos que se niegan a sentir o a percibir que hay otras realidades, y que generalmente estas no tienen porque ser del gusto de estas personas.

Yo creo que por eso caígo mal a algunas personas. Porque nunca callo. Ni para bien ni para mal.

En cuanto a decir siempre lo que pienso está claro que no soy de aquellos que pueden soltar en una reunión "me cago en todos vuestros muertos". Primero porque tengo educación y segundo porque en ese preciso momentos las formas me habrían perdido, y la gente que me conoce de verdad sabe que desgraciadamente (o afortunadamente), mis formas suelen ser bastante normales, por no decir cuasi-amables. Eso no ímpide que pueda decir en una reunión o a algunas personas en singular "te he calado", "ya sé de que vas", "tú problema es este o el otro" o bien "estás llenos de complejos, no me ralles la cabeza y enfrenta tus miedos".

O bien no me da miedo decir que, gracias a Dios, pues nunca me gusto la alienación de pensamiento, pienso lo que me da la real gana sobre política, educación, arte o sociedad. Yo entiendo que a cierto sector de mi edad se le ponga dura salir a la calle con un cartel para defender tal o cual idea, pero en mi derecho estoy de defender lo mismo o lo contrario, y no tener que salir con una pancarta a la calle. Por supuesto que me estoy refiriendo a la política. Se piensa que por el mero hecho de ser joven ya tienes que repetir ciertas consignas y/o participar o ser afines a cierta ideas políticas. Yo paso. A mi nadie me dice lo que tengo que pensar, y mucho menos nadie me puede juzgar de reaccionario porque con 30 años que tengo aún no he ocupado una casa, ningún policía me ha metido con la porra o bien no he gritado eso de "democracia real ya".

También tengo mis opiniones sobre el arte. Siempre he dicho y diré lo mismo; el arte es algo material y por lo tanto es medible, o sea opinable y analizable, y este análisis, cual ciencia se tratase, debe dar un resultado ya sea negativo o positivo. Yo no te diré jamás que eres tonto o gilipollas porque te gusten o ciertos directores o ciertas películas, de hecho jamás he pensado eso de alguien que vea o aprecie cierto tiempo de cine, pero me considero con todo el derecho, puesto se de lo que hablo, de decirte que cual o tal director, que aquella película que tanto te gusta, es una mierda como la copa de un pino. Y te lo demostraré. Otra cosa es que tu me creas o no. En realidad no trato de convencer a nadie, simplemente te trataré de demostrar que esa película o ese director es una puta mierda porque en base al análisis aceptado que existe sobre el cine, y sobre cualquier arte, esa película es basura.

Así que caígo mal también porque no soy un gafapasta que adora a Trier o a cualquier ruso de nombre impronunciable que hace películas de mierda pensando que es el mejor director del mundo y encima estos gafapasta que lo creen. Yo te demostraré que este tipo no sabe hacer cine y que tu tienes una opinión equivocada, no en base a tus gustos, sino en base a que te crees que ese director es el mejor de la historia.

Me ha pasado recientemente con TIN TIN. Llevamos tres años asistiendo a una campaña publicitaria sobre esta película. Llevamos tres años donde nos han metido en la cabeza que cuando se estrene tenemos que pensar todos que es una obra maestra. Y así lo repiten casi todos, todos leyendo la misma crítica y asintiendo a la misma opinión pública; OH, TIN TIN ES UNA OBRA MAESTRA. Pues y una mierda.... dejando a parte sus virtudes que la tiene y su espectacularidad, TIN TIN es una mierda como la copa de un pino. Cuando dices eso nadie razona, en el mejor de los casos te dicen "joder, es la polla porque es divertida, es de aventuras, como antes, y encima está bien hecha", y yo entonces a continuación digo, ¿Y? ¿Eso convierte a algo en una obra maestra?

Como podéis observar tener criterio propio es peligroso, sobre todo sino repites lo que dice la mayoría o lo que nos hacen creer las campañas publicitarias.

Y en cuanto a la verdad, si me preguntas te la voy a decir. OJO, la verdad... MI VERDAD, MI OPINIÓN, LO QUE SIENTO SOBRE ESTO Y AQUELLO.

Si haces cortos y me preguntas te voy a decir la verdad. Si te ofendes es tu problema. No haberme preguntado. Si eres amiga o amigo mío y te echas una pareja y me pides mi opinión te voy a decir la verdad; te guste o no. Y si tenemos una pelea y me atacas con cualquier argumento falaz te voy a decir la verdad que nadie, jamás, se atrevió a decirte.

Y tampoco te voy a mentir. Si quieres que te diga algo que quieres oír mejor no me preguntes. Considero que un amigo de verdad es aquel que precisamente no hace esto. Conozco a muchas personas que se rodean de palmeros que le dicen ERES GENIALMENTE MARAVILLOSO, UN GENIO... ESTO LO OTRO. ¡Mentira! Pero supongo que es cómodo vivir en un auto-mundo donde tu eres el rey y los vasallos aplauden tus gracias. Lo malo de esto es que tus vasallos tarde o temprano se irán y entonces te encontraras cara a cara con tu verdad.... en ese preciso momento te darás cuenta que la has cagado, y mucho.

Por eso yo no quiero palmeros. Quiero a gente de verdad. Me encanta ver que Júlia, Gema o Susana no excusan mis argumentos y a veces simplemente me dicen NO TIENES RAZÓN, NO TE ENGAÑES. Y en ese preciso momento me siento enormemente afortunado, puesto que, si yo ímpido ver mi verdad, porque o bien me auto-engaño o bien me auto-censuro, tengo ahí a personas que me quieren que me dicen perfectamente lo que no quiero oír, o sea, la verdad, que es aquello que en algún u otro momento nos puede hacer daño... o darnos miedo.

Cuando las cosas te van bien también empiezas a caerle mal a la gente. No falla. Este tema es justo como un reloj. Te van bien las cosas... ZAS!!!! Puñaladas van... puñaladas vienen. De hecho, incluso muchas personas te ven diferente. O sea, tu no cambias, son ellos! Es su opinión sobre ti lo que varia.

"Me ha dicho esto porque se cree tal o cual cosa", "me ha dicho esto por lo otro"... y una mierda, con perdón. Yo sigo siendo igual que siempre, en actitud y en formas.

Esto se aprecia claramente en el sector artístico de esta ciudad. Haces dos años todos eran mis amigos. Ahora hay división de opiniones casi al 50% en esa condición amistosa. ¿Mi delito? Haber rodado el que hasta la fecha es el cortometraje andaluz más seleccionado del año en toda España. Y no lo digo yo. Lo dice la junta de Andalucía. Y está el google para que se pueda comprobar. O sea, esto es una realidad de la que yo no soy responsable.... lo otro, lo de la amistad ya es responsable cada uno. Y ahora sé que se reunen en lugares para tener charlas donde se me pone a parir, a mi y a otros compañeros a los que les está yendo muy bien las cosas.

Esto demuestra fríamente la falsedad de las relaciones y la gran vigencia del deporte nacional español "la envidia". Así que de boca en boca van pasando falsos rumores que dan lugar a falsas opiniones, y por lo tanto un tipo al que no conozco se puede permitir la licencia de que, por arte de magia, sin haber cruzado conmigo ni dos palabras, yo le caigo mal.

Os confieso que esto no me preocupa demasiado excepto interfiera en mi trabajo y en las relaciones laborales que pueda tener con otras personas. En ese caso, me tranquiliza saber que mis amigos de profesión, los que son amigos de verdad, saben que estoy con ellos para las buenas y para las malas. Sin concesiones. Y que mi aliento no les falta, ni por supuesto mi apoyo.

También he defendido a muchos amigos del audiovisual que sinceramente no se merecían tal defensa, al menos visto lo visto. Cuando muchos se reían de ellos y les decían "son unos frikis", yo siempre decía "hacen sus cortos y sus cosas. No son frikis. Hay que darles una oportunidad. Tienen un talento latente". Y testigo de esto algunas personas que saben que es verdad. Pues bien, las mismas personas a las que yo defendía de ataques de terceros, muchas de ellas, son las que me atacan porque mi corto va bien. Curioso, ¿verdad?

Esto me pasa por querer ser siempre una especie de mediador y de Salvador de posturas enfrentadas. Por creer que todo el mundo es bueno hasta que se demuestre lo contrario.

Supongo que esto no dejará de pasarme nunca.

Es mi forma de ser.

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