martes, 27 de abril de 2010

DIRECTORES Y SUS MEJORES FILMS

Miguel Tomé, amigo bloguero, me envía el nombre de algunos directores para que, según mi opinión, diga cual es su mejor película y porqué. Pues nada; vamos a ello.

HITCHCOCK. "Los pájaros".

Como dije hace un par de semanas, creo que se trata de la película más moderna y cinematográfica de toda la historia del cine. Recomiendo verla dos veces, la primera vez con sonido y la segunda en ausencia de él. Viéndola sin audio se entiende perfectamente, lo cual quiere decir que es una obra magna, ya que el cine debe ser ante todo imagen. Este film tiene cosas muy curiosas, como por ejemplo los diversos cambios de puntos de vista que se suceden de un personaje a otro. Y me atrevería a decir otra cosa más; es la única película que he visto donde, en dos o tres momentos, podemos llegar a saber lo que en ese mismo instante están pensando alguno de sus protagonistas, y todo ello gracias a un dominio de la imagen, del montaje y de la técnica realmente soberbio.

FRIZT LANG. "M. El vampiro de Duselldorff".

Primera película sonora del maestro alemán y una de sus imnumerables obras maestras. La grandeza de este film radica en la gran solidez del elemento narrativo estrictamente cinematográfico, y de un inteligente uso de los efectos de sonido. Para muestra un botón; una secuencia dónde los policias hablan sobre como cazar al asesino de niñas mientras fuman abundantemente, por obra y gracia del montaje saltamos a otra secuencia donde los gansters de la ciudad hablan de lo mismo, y los gansters también están fumando abundantemente... a partir de aquí el director va cortando y la secuencia entre estos dos espacios crean una ilusión de unidad, o lo que es lo mismo, el director quiere hacernos ver que policías y gansters son la misma cosa... corrupción en un lado y corrupción en otro lado. Ah, los primeros diez minutos son una muestra de cine mudo-sonoro increiblementes maravilloso.

BILLY WILDER. "El apartamento".

Es el mejor guión que se ha escrito jamás. No cabe duda. Esto ya dice mucho de este film. Con esta película termina el cine clásico y empieza el cine moderno. Una comedia y un drama en su justa medida. Unos personajes perfectamente perfilados y una historia cotidiana que se hace grande, personal y universal a cada escena. A esto hay que añadir un uso del montaje totalmente brillante, diría que muy moderno para aquellos tiempos... y algunas secuencias dirigidas con una pasmosa seguridad y grandiosidad en cuanto a elementos dramáticos y narrativos se refiere. Es la historia de un hombre normal, con un trabajo normal, rodeado de gente normal... cuyo drama pequeño e insignificante se hace enorme ante nuestros ojos, por tanto la empatía es total. Si a esto le unes unos actores en estado de gracia tienes como resultado "El apartamento", la película que, pasen los años que pasen, sigue siendo actual. Pues no hemos cambiado. Nuestras pequeñas miserias e ilusiones de todos los días aún nos siguen acompañando.

COPPOLA. "El padrino II".

Lo maravilloso de esta película es que en ella hay tres films totalmente distintos. Por un lado la vida de Michael Corleone, hijo de Vito Corleone, que debe asumir la responsabilidad de hacerse cargo de la familia. Por otro lado la historia de su padre, Vito Corleone, desde que emigra a los Estados Unidos hasta que se hace poderoso en el barrio donde vive. Y la tercera película es la perfecta dicotomia y ambivalencia que se crea por el resultado de estas dos historias superpuestas, una película que no se ve, pero que se siente, se percata... los recuerdos del hijo nos llevan irremediablemente a la historia de su padre y viceversa. Todo esto gracias a un poderoso uso del montaje y un inteligente uso del fundido en negro. Todos los actores están inmensos, me atrevería a decir que es la película mejor interpretada de toda la historia del cine, ya que cada actor hace suyo al personaje, por muy pequeño e insignificante que este sea. Son tres horas y cuarto de película que te atrapan desde el primer minuto hasta el final. Cuando termina sientes que perteneces a esa familia. Que conoces todos sus secretos. Que eres el punto de unión entre un hijo que se quiere parecer a su padre y un padre que, de estar vivo, sentiría que su hijo no ha entendido nada de lo que él pretendió enseñarle.

SCORSESE. "Taxi driver".

No es mi absoluta favorita de este director pero no me cuesta reconocer que es, de lejos, su mejor película. Es un tratado inmenso sobre la soledad moderna que deja en paños menores a todas las películas de Antonioni que tratan el mismo tema. Aunque ahora que lo pienso, "Taxi driver" es muy Antonioniana. Lo mejor de este film es su puesta en escena totalmente estilizada que representa la mente enferma y a punto de estallar de su protagonista principal; luces de neón, uso de la cámara lenta, rápidos travellings, panorámicas subjetivas que expresan el pensamiento (y la visión) de Travis. Definitivamente es una obra capital del cine moderno... ¿o debo decir post-moderno?

WIM WENDERS. "Paris-Texas".

Esta película es de una belleza impresionante. Es curioso que uno de los mejores directores que ha mostrado la belleza de las tierras norteamericanas haya sido este director que no es natal de Estados Unidos, sino de Alemania. De ahí su mirada curiosa y poética, mirada infantil de alguien que se siente fascinado por unas imágenes que observa y filma por primera vez. Hermosa la historia; un hombre que busca su identidad, que no sabe quien es... un hombre que huyó de su presente sin saber que, tarde o temprano, debía enfrentarse a su futuro. Es la historia de un padre y un hijo que apenas se conocen, y de como poco a poco van creando vínculos donde la admiración y el misterio llenan ese espacio vacío que el padre dejó por su ausencia. Magnifica la penúltima secuencia; casi media hora donde, separados por un cristal, ese hombre que huyó y la mujer que dejó atrás, vuelven a hablar del pasado. De los miedos. De los rencores. Puesta en escena justa y precisa, donde los encuadres fijos y los fuera de campo guardan una increíble relación con aquello que se nos está contando.

ALMODOVAR. "Todo sobre mi madre".

Su única obra mestra. Una película que se siente con el corazón, entra por los ojos y queda retenida en tus retinas con la fuerza inmensa de aquellas películas que, gracias a su grandeza, te hacen vivir una ilusión durante hora y media y creer en el cine como un elemento vital de comunicación, y de arte, pues "todo sobre mi madre", con sus grandes defectos y sus buenas virtudes es una obra de arte que debe ser visionada con la ingenuidad plena de saber que, aunque la historia sea exagerada o poco creíble, está realizada con una sensibilidad y un estilo totalmente fuera de lo común. Es una película cuyo tema principal son las apariencias y la actuación, sean sus personajes actores o no. Sobre el dolor y sobre el amor. Sobre el espíritu de sacrificio y sobre la fraternidad más absoluta. Sobre la compasión. También sobre la redención... y el perdón. Valores dramáticos aparte, este film tiene un ritmo trepidante, un uso del montaje totalmente ajustado a lo que se quiere contar, una forma cinematográfica (elementos del encuadre) que producen sensaciones pocas veces sentidas en el cine español, y me atrevería decir que en el cine mundial, al menos en las últimas décadas. Las interpretaciones, todas, están impregnadas de sentido y sincero aroma a verdad. No me canso de verla. Y siempre, siempre, siempre... me emociono con lo que cuenta... y por como está contada.

PAUL THOMAS ANDERSON. "Punch-drunk love".

Pequeña obra de cámara. Marcianada total de este director barroco y demoledor que tiene tantos admiradores como detractores aférrimos. Lo mejor de este film es que durante 80 escuetos minutos la puesta en escena está perfectamente integrada en lo que el director nos quiere contar. Fondo y forma son la misma cosa. El personaje está ansioso y algo paranóico, por tanto la puesta en escena, el uso de la cámara, de los colores, del montaje, de los efectos de sonido, tiene el mismo sentido, el mismo efecto. Es como estar viviendo en propias carnes lo que el personaje vive en la película. Cuando el personaje siente que el amor ha llegado, que tiene fuerzas para amar, la película toma un rumbo totalmente alocado, infantil, poderoso, positivo... y la narración se vuelve entonces de una fuerza vital inusitada, de un poder sugestivo casi cómico y musical que hace creíble todo lo que el personaje siente, todo lo que nosotros sentimos cuando el amor llama a nuestras puertas. Es una pequeña gran película que no deja nada al azar, que está tremendamente trabajada, llena de sentido, (sí, hasta ese piano que no tiene, aparentemente significado alguno, tiene una función en el film). Lo dicho; obra inmensa. Para ver con ojos nuevos. Libres de prejuicio.

STEVEN SPIELBEG. "La guerra de los mundos".

Uf... este me ha costado, eh. Esta entradilla va a traer mucha polémica, pero es lo que siento. ¿Por qué "la guerra de los mundos"?

Por que Spielberg es sinónimo de espectáculo y este film lo es por sus cuatros costados. Por que los que tachan a Spielberg de director sensible y para niños se quedan callados al ver esta película. Por que es oscura y dura. Por que tiene un sentido de la puesta en escena que, cuando lo cree necesario, huye de las espectacularidad para concentrarse en lo íntimo. Por hacer del cine un autentico lenguaje a traves de imágenes y sonidos... que no de palabras. Por que es cine del bueno en estado puro, no llega a "los pájaros" de Hitchcock pero se le acerca, proponen una similar visión sobre el sentido de la puesta en escena, del punto de vista y de la utilización de un lenguaje estrictamente cinematográfico, que en nada se parece al lenguaje literario, al pictórico o al escénico. Por su construcción memorable del miedo, del pánico particular y general. Por su fina pero profunda disección de los comportamientos humanos antes situaciones extraordinarias. Por todo esto y mucho más, para mi, la mejor película hasta la fecha de Spielberg es; "La guerra de los mundos".

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