Ayer me metí una sobredosis de cine en el festival de Málaga que ya quisiera Garcí en sus mejores tiempos. Me vi nada más y nada menos que 5 películas. Eso sí, repetí al final de la noche con "La verguenza". Peliculón, en serio. Se estrena pronto. Tenéis que ir a verla.
Hoy me he visto un par de películas... No podía más, basicamente porque aún quedan 5 días de festival y a este ritmo frenético la cara se me va a quedar cuadrada. Una película a las nueve de la mañana. Otra a las doce. Otra a las cuatro. Otra a las siete. Y otra, sí hay ganas... A las nueve. En fín, me voy a volver todo un experto en cine español.
Veo sabia nueva entre los nuevos directores. Una elegancia cinematográfica entre los nuevos creadores que por fín han entendido que el cine además de guión es montaje, fotografía... Estética, vamos.
Es esta una generación de cineastas totalmente preparados que no se averguenzan de reconocer que sus referentes son películas de género. Hace algunos años todos querían ser Erice, Godard... Este tipo de creadores cinematográficos, todos ellos muy interesantes, buenos, profundos... Pero que tienen, según mi punto de vista, un grave error; su audiencia es muy selectiva. Son películas hechas para unos pocos. Y ojo, no porque la mayoría del público no pueda entender estás películas, que el público no es tonto, sino porque sus codigos narrativos son complicados... Digamos que son películas cerradas que no se molestan en llegar al espéctador, para verlas todos tenemos que hacer un esfuerzo tremendo en entrar hacia ellos, y por eso yo siempre entiendo y entenderé a la mayoría del público; un arte que te obliga a meterte de lleno en él y rebanarte los sesos para poder disfrutar de él, puede que sea un arte, no digo que no... Pero esta postura, de cara a algunos directores, me parece muy egoísta... Por lo tanto, este arte, este tipo de cine, que me parece genial y maravilloso por otro lado, es un arte egoísta... Que no busca la idenfiticación ni la empatía sino la intelectualización.
Pues bien; las referencias de estos nuevos directores de cine es el cine de género; la comedia, el thriller, la ciencia ficción, el terror... Y han dejado a un lado a Godard o Erice y sus mayores idolos cinematográficos son; Scorsese, Taratino, Coppola... Y porqué no; Amenabar.
En cualquier caso es una generación de directores que han entendido que el cine debe, primero entretener, y luego, si hay suerte y se tienen ganas... Aleccionar, o mejor dicho; hacer pensar. Pero pensar en el público, por eso de entretener, ya me parece un acto tan genial y brillante que muchos de estos nuevos directores solo merecen mi más profunda admiración, ya que, precisamente es esto lo que necesita el cine epañol; películas profesionales y de género que puedan llegar al máximo número de público posible.
Unas películas tendrán una calidad mejor y otras peor, pero, a diferencia de lo que opinan muchos directores que viven aislados en su realidad super complicada y super "yo soy un genio", a mi me gusta mucho que un director diga; quiero que mi película sea vista por mucha gente. De eso trata básicamente el cine... Y es mejor no engañarse con falsas ideas de llegar a una supuesta élite intelectual cinematográfica que, lo quieras o no, te daran mucha fama y muchas ínfulas de autor, pero tu carrera cinematográfica se verá aparcada y con el tiempo, que con suerte será mucho, te puedes convertir en un director de pocos y para pocos.
Yo cuando hago una obra de teatro trato de llegar a todo el mundo. Por supuesto que por ello no dejo de hablar, cuando puedo, de cosas importantes, pero estás cosas trato de presentarlas desde una perspectiava común y sencilla donde todo el mundo pueda sentirse, sino identificado, al menos habitante de terrenos comunes.
Yo siempre he escrito dramas. Desde hace un tiempo a esta parte me he dado cuenta que la comedia llega más, y que para colmo mis textos, más o menos, hacen reír, por lo tando he dejado un poco apartada mi faceta de "dramatismo puro en cortos y demás" y ahora me estoy centrando en una serie de temas que solamente retrato de forma cómica. Es más certero, más habitual... incluso es más poético... Y si se mira bien, la comedia, siempre, es más dramática.
Mi último corto trata de forma cómica la historia de una persona que "por cojones" quiere cambiar la forma de ser de otra. El tema de la intolerancia es un tema serio, que ha dado buenas películas dramáticas... Pero en mi último guión he querido hablar de ello desde una perspectiva cómica. Hay dentro de él muchas situaciones dramáticas que no tienen ninguna gracia, vamos, que en la vida real nos acojonarian, pero el truco está en hacer de estas situaciones un distanciamiento con el fin de que el público se pueda reír... E inmediatamente después, pueda pensar.
Cuando mi actor leyo mi guión me dijo; Es muy divertido pero es cruel... No tiene gracia. Y yo le dije; me alegro. Eso es precisamente lo que quiero que piense el público. Sí, me gusta la comedia, y que cojones, hablando de dinero y tal, es mucho más rentable que el drama... La mayoría de la gente no quiere pasar un mal rato necesariamente cuando va a al cine... Pero todo el mundo, en cualquier momento del día se quiere echar unas risas... Así que la comedia y yo pretendemos estar unidos por un tiempo. A ver que tal nos va el compromiso.
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Por otro lado, estos días asisto perplejo a la labor de acoso y derribo que cierta parte de la crítica hace a todas las películas que se ven en el festival de cine. Muchas de las preguntas que en las ruedas de prensa realizan los críticos a los directores y actores son, a grosso modo, realmente demoledoras... Vamos, que van a matar sin más intención que la de cargarse, por el gusto de joder, el trabajo de un director y un equipo, que mejor o peor, han hecho la película que han querido hacer.
Yo hace unos años era muy crítico con todas las películas que veía. Hasta que un amigo mío, director de cine, me dijo; es fácil criticar cuando no se rueda. Es fácil cargarse el trabajo de los demás cuando no se tienen cojones de ponerte a hacer lo mismo.
Hablando claro;
¿Le digo yo a un médico que yo hubiera hecho mejor la operación de corazón que él acaba de realizar? No, ¿verdad? Entonces, ¿por qué un crítico se puede permitir decir la soberana gilipollez de que el lo hubiese hecho mejor, hubiese quitado esto del guión, o lo otro, hubiese rodado esto de este modo... o de otro? Sencillamente la cuestión no tiene ni pies ni cabezas, de verdad.
Yo siempre me había negado a creer lo que mi amigo me decía... Porque el solía comentar que todos los críticos de cine son, en realidad, directores frustrados. Yo, me negaba a pensar que esto era así, pero visto lo visto estos días en el festival, y observando la labor miserable de algunos críticos, comienzo a pensar que mi amigo tenía razón; pura y simple envidia. "Si yo no soy o no puedo ser director al menos puedo cargarme el trabajo del que sí lo es". Realmente patético, de verdad.
Es por eso que no pienso hacer (ni en mi blog, ni a título personal) ninguna crítica más de todas las películas que vea en este festival. Me limitaré a decir sí me han gustado o no... Pero no pienso caer en este juego absurdo.
Además, y esto ya desde el corazón, me da una pena inmensa ver en la rueda de prensa, que el director y los actores se sientan frente a los críticos realmente acojonados y asustados. En serio, se les ve en la cara. Lo pasan realmente mal. No es justo. Ojo, se puede y se debe opinar... Pero no opinar con la única intención de destruir un trabajo que, guste más o guste menos, ha costado mucho hacer. Se puede ser un poco más amable o simplemente, sino te ha gustado la película no vayas a la rueda de prensa a decir a los cuatro vientos que LA PELICULA TE HA PARECIDO UNA MIERDA. Cállate mejor porque estás demostrando no tener respeto por el trabajo. Sí, ya sé que todos los cineastas se exponen y deben exponerse a la crítica, pero os juro que lo que estoy viendo este año me está dejando sin palabras.
He oído frases cómo estás;
-Su película es un simple telefilm.
-Cómo obra de teatro funcionaría, pero cómo película no funciona.
-Es un doblaje asqueroso.
-Creo que el guión está mal planteado.
-Sus metáforas son imnecesarias.
-¿No cree que su cine es imnecesario?
-Me he aburrido cómo una ostra.
-No se ha mojado.
NO, POR FAVOR.... NADIE SE MERECE ESTO, DE VERDAD. SÍ PUDIESEIS MIRAR A LOS OJOS DE LOS DIRECTORES Y LOS ACTORES EN LA RUEDA DE PRENSA... EN SERIO, DA UNA LÁSTINA INMENSA.
DEFINITIVAMENTE LOS CRÍTICOS; VAN A POR ELLOS.
¿Qué que pienso de los críticos de cine a día de hoy?
Lo que pienso viene escenificado perfectamente en la película "Ocho y medio" de Fellini.
Así de claro.
Un abrazo.